domingo, 22 de junio de 2008

Negociación, arbitraje y asimilación


La psicología social propone tres soluciones diferentes al conflicto entre los individuos: negociación, arbitraje y asimilación.
La negociación parece ser la solución más lógica en todo tipo de relaciones, bueno, más coherente desde mi perspectiva, siempre caben otras opiniones… Para mí, la negociación implica evitar silencios de significado ambiguo, implica evitar angustias innecesarias y liberar tus más profundas frustraciones. Pero como podemos observar, ante conflictos como el palestino-israelí, las personas y los grupos pueden tener ciertos intereses individuales o grupales que impiden, por cualquier motivo, ceder por otros.
La palabra arbitraje me sugiere un árbitro, regordete, bajito, con las mejillas sonrosadas y el ceño fruncido, girando sobre sí mismo y alzando la tarjeta roja en el campo de juego. Exprimiendo ahora un poco más mi imaginación, el arbitraje también me evoca imágenes de esas madres propensas a gritar y regañar a sus hijos. Como por ejemplo podría ser Lois, madre de los Malcolm, de la serie anglosajona, “Malcolm in the Middle”. Es una mujer fuerte, maniática del control con una habilidad asombrosa para detectar travesuras. Una persona incapaz de admitir que se ha equivocado y nunca deja que otra persona la manipule o imponga su voluntad sobre la suya, mas para rematar, tiene un 99% de razón en todos los conflictos con sus hijos.
Y finalmente con el término asimilación mi imaginación desemboca en la palabra olvido, aunque asimilar no tiene por qué implicar el olvido. Olvido, palabra que aparece en situaciones más complejas, que aparece como última solución ante el conflicto.
Es el recurso que más problemas conlleva si no se hace bien. De hecho, hay poetas sentimentalistas, entre ellos Juan Ramón Jiménez, que no creían en su existencia. Freud también decía que en nuestro inconsciente residían pensamientos y deseos que creíamos haber olvidado.

La RAE tiene tres definiciones diferentes y similares al mismo tiempo para este polémico término:

1. m. Cesación de la memoria que se tenía.
2. m. Cesación del afecto que se tenía.
3. m. Descuido de algo que se debía tener presente.

Evidentemente Juan Ramón Jiménez tenía como referente la definición número dos y Freud la número uno y tres.
No sé si creo en el olvido. Quizá si en el descuido, o en el olvido en nuestro consciente. ¿Puede realmente cesar algo en tu memoria? Puede que se te olviden las llaves del coche porque tengas muchas o, al contrario muy pocas (todos conocemos las resacas) cosas en la cabeza. Puede que un nombre o un término no te venga a la cabeza (los llamados actos fallidos de Freud). Puede que seas capaz de aparcar los hechos por un momento.
Nuestra mente es algo complejo, un órgano que como tal tiene un funcionamiento autónomo a nuestros deseos… Por todo ello no creo que la asimilación, en la cual es imposible adjuntar el olvido, pueda ser una solución al conflicto…

Ahora decidme, ¿habéis sido capaces de olvidar algo realmente ? Y ahora en el plano global, ¿se ha olvidado el franquismo? ¿Se ha olvidado el nazismo? O ¿de verdad, el día a día, el mundo es capaz de olvidar que África se muere? Me podríais decir, que se ha aprendido a convivir con ello, pero el resurgimiento de nuevos conflictos hace evidente que no hemos conseguido solución alguna…

1 comentario:

Anónimo dijo...

La solución llegará por sí sola, lo único que hace falta es que queramos mirar a África a la cara... Pienso, cuando África me quita el sueño con sus llantos, que el mundo es más feliz creyéndose que han olvidado, haciéndo como que se olvidan de que este país no existe, o para no ser tan radical, que la situación no es tan mala y que hay gente que ya ayuda... Eugenia Rico, que es escritora y habla mucho sobre estos temas, dice que recogemos al perro que vemos tirado en la calle porque lo vemos, pero que no somos capaces de imaginarnos como lo estará pasando un niño soldado en Sierra Leona, por coger un ejemplo de los billones que hay en el mundo. Esta mujer me hizo pensar en la capacidad de abstracción de un humanO Y ESO SUMADO AL TRABAJO DE pSICOLOGÍA SOCIAL sobre LA PSICOLINGÜÍSTICA EN LA COMUNICACIÓN POR INTERNET, me llevó a la conclusión de que la sociedad, de frágiles vinculos humanos, tiene poca imaginación... Quizás se pueda solucionar con la lectura: los que leen tiene mayor capacidad de abstracción y además no solo eso, sino q viven los diferentes modos de vida posibles a través de la lectura y la imaginación...
Pero volviendo al tema, el mundo quiere olvidarse, con sus trajines diarios, de q en muchos lugares, no sólo África, se sufre. A mi me parece que con tanto trabajo lo están consiguiendo. Pedes olvidar algo si ocupas tu mente con otras cosas que no te dejen mucho tiempo para pensar: porqué sino los sabios sufren tanto?